Asamblea Nacional de Nicaragua. |
Nicaragua:
La manipulación de las “regalías” de los diputados: Para un debate honesto con
el pueblo
Solo los diputados bolivianos ganan menos en América Latina
Por Jorge
Capelán, periodista, Managua
Se ha instalado en la conciencia popular la idea
de que recortar los supuestos privilegios de pachá turco que tendrían los
miembros de la Asamblea Nacional tapará el hoyo del INSS.
Ayer demostramos que
los sueldos de los miembros de la Asamblea Nacional son los segundos más bajos
de toda América Latina. Ahora examinaremos qué hay detrás de las supuestamente
escandalosas “prebendas” de los parlamentarios. Primero queremos aclarar tres
cosas:
La primera, es que si se les va a bajar los
sueldos a los diputados, que se les bajen, pero eso no va a resolver el
problema del INSS. Por el contrario, subirle la cotización a los ricos y a las
grandes empresas sí va a resolver ese problema. Ya es hora de que Chanito
empiece a aportar algo y no se contente de vivir a costillas del pueblo (porque
eso es lo que ha venido haciendo en gran medida). No escribo este artículo para
que se tenga lástima por los diputados, ellos viven bien, pero lo que quiero
explicar es cómo se ha exagerado este tema para ocultar otros intereses mucho
más poderosos.
Segunda, los diptados son electos por el pueblo
y están ahí por el voto popular. Llama la atención tanta rabia contra quienes
fueron electos por el voto popular y tanta condescendencia por empresarios
(COSEP, AMCHAM, Piero Cohen) a quienes nadie eligió para ser nada y que en su
mayoría detentan las fortunas que poseen sólo por el hecho de ser ”hijos de” y
hablar con un lenguaje refinado y oloroso.
Tercera, que si hay algo que en mi modesta
opinión sí se puede eliminar es el fondo de 1,4 millones de dólares que desde
la década de los 90s reciben los diputados para becas y para ayudar a
movimientos sociales afines. Eso no lo inventó ni lo impuso el Frente
Sandinista, es producto del proceso de paz que entonces se vivió. La decisión de
eliminar ese fondo es una cuestión política. En contra de eliminarlo también se
puede argumentar (legítimamente) que se trata de un mecanismo para garantizar
el pluralismo político en la sociedad. Muchos países del mundo, incluso las
socialdemocracias europeas, han tenido mecanismos similares para que
determinadas orientaciones políticas que quedaban en minoría no desaparecieran
por hambre de recursos. Lo cierto esa cuestión no puede ser una base legítima
para intentar tumbar un gobierno.
A continuación, los mismos datos del Diario La
Prensa* pero presentados de manera sencilla y sin todo el lenguaje viperino de
ese pasquín:
1) Lo que los diputados “se recetaron” a inicios
de este año NO ES UN AUMENTO sino una compensación del 5% por la pérdida de
valor frente al dólar. A nadie se le ocurriría llamar “aumento” a un ajuste
igual que hace el gobierno con las pensiones todos los años (y que por cierto,
el FMI, el COSEP y los economistas de La Prensa sueñan con eliminar) No sé
ahorita cuánto fue esa pérdida en 2017, pero un indicador bastante cercano es
la inflación, que se situó en 5.98% ese año.
2) La Asamblea Nacional tiene 91 diputados. El
5% de ajuste salarial significa unos 5 millones de córdobas al año, o sea: unos
158 mil dólares, es decir 0.2% del monto total de hoyo en el presupuesto del
INSS que es de 80 millones de dólares.
3) Pero OJO, porque NO GANAN toda esa plata: De
eso se deducen 27,100.77 córdobas por el IR y (”¡Oh! ¡Santa Jubilación, Batman!”)...
el INSS. Cabe agregar que si estuviera rigiendo la reforma que decretó el
gobierno, esos mismos diputados estarían cotizando MUCHO MÁS porque esa reforma
quitaba el techo de 72.000 córdobas gravables para la seguridad social. Lo
siento mucho, pero la gente indignada que protestaba en las calles fue vilmente
utilizada. Si no fuera porque esas cosas afectan a todo el mundo, hasta daría
pesar, pero en realidad da rabia, mucha rabia.
4) Adicionalmente, cada diputado recibe 135
galones de combustible al mes. Al precio de la gasolina hoy en la calle, más de
16 mil córdobas (OJO, porque ese no es el costo real de la gasolina que paga el
gobierno). Eso por año para todos los 91 diputados significa cerca de 18.3
millones de córdobas o unos 583 mil dólares un cambio de 31.5, o sea que
todavía quedaríamos lejos, muy, muy lejos, de afectar significativamente el
déficit del INSS de 80 millones de dólares. Cabe preguntarse: Digamos que le
quitamos toda esa asignación a las y los diputados, ¿en qué se van a movilizar
a los departamentos? ¿En bus? ¿En helicóptero? Seamos serios, por favor...
Estas cosas el pueblo NO LAS SABE y por eso lo engañan.
5) Tienen doble seguro médico con el INISER el
cual supuestamente cubre a los cónyugues. (”¡Santo cielo, Batman!”) Con este
seguro, si las y los diputados o sus cónyugues van a un médico privado (excepto
el dentista, que no está contemplado), éste les cubre el 20% de los gastos.
Como La Prensa no sabe de cuánto es este seguro, no podemos calcular lo que
cuesta en dólares, pero sí podemos entender que no cubre TODA la atención sino
una quinta parte de lo que cueste ir a un médico privado. O sea que el
parlamentario termina pagando la mayor parte de la factura. Habría que
revisarlo, es cierto, pero sinceramente no parece ser eso lo que venga a salvar
al INSS.
6) Además de todos esos lujos y regalías de ”pachá
turco”, los diputados se reparten discrecionalmente un fondo social de 1,4
millones de dólares (fondo que NO inventó el Frente Sandinista) destinado a
financiar movimientos sociales afines y a becas a jóvenes. Durante los 16 años
de la larga noche neoliberal ese no fue un problema para La Prensa,
especialente porque muchos de sus padrinos y organizaciones amigas se
beneficiaban de esos fondos, pero como a partir del año 2007 su prioridad
absoluta se convirtió en desestabilizar al gobierno sandinista, entonces eso sí
se ha vuelto una argumento político fundamental. Adelante, que se quite ese
dinero, pero cuidado porque eso también va a perjudicar a la derecha. Después
no se quejen...
Es verdaderamente CRIMINAL la manera como se le
ha mentido a este pueblo sobre la economía del país desde las páginas del
diario La Prensa, desde la Radio Corporación y desde otros medios afines, como
también es criminal la negligencia de nuestros medios sandinistas sobre esos
temas. La falta de preparación de las y los colegas periodistas en cuestiones
económicas no es ninguna excusa, porque bien se pudieron haber hecho talleres
en los que se alfabetizase a la gente sobre economía y así elevar el nivel de
la calidad de la democracia en el país.
* Datos de La Prensa, 26 de febrero de 2018 ”Los
diputados de la Asamblea Nacional se recetan aumento salarial”